Este septiembre no viste el mismo traje, lleva consigo sol, aire caliente, verde y un leve aire fresco por las mañanas. Las noches se envuelven en aire fresco pero el cuerpo no reclama calor de algodón. Las chamarras aún cuelga, la calle se llena de voces y hay sonrisas en el ambiente. Los árboles aún resguardan su verdor aunque se divisa un leve y tenue manto de hojas en el piso. Oficialmente el otoño ya se anunció pero la naturaleza aún huele a verano.
September draagt niet hetzelfde pak, hij draagt zich zon, warme lucht en een lichte groene verse lucht in de ochtend. De nachten zijn verpakt in de frisse lucht, maar het lichaam vraagt zich geen warme katoen. De jassen hangen nog steeds, de straat is vol met stemmen en er zijn glimlach op de omgeving. De bomen bewaken nog zijn groenkleur, maar er ligt een zachte deken van bladeren op de grond. Officieel is de najaar al aangekondigd maar de natuur ruikt nog steeds aan de zomer.
Lo cotidiano es lo de todos los días, intranscendental, parece, pero es el proyecto que llamamos vida. Sobresaltos a veces, esporádicos, pero también de este quehacer de la vida.
domingo, 25 de septiembre de 2016
lunes, 12 de septiembre de 2016
Prueba del teatro
Aquella
mujer de pelo colocho y piel morena se levantó de su silla y comenzó a hablar. En
un par de segundos nos transportó a los Estados Unidos de los años 60. Con su
relato reconstruyó un escenario visto tras un lente blaco-negro, y la violencia
del Ku Kux Klan, violencia y polarización sin duda temas actuales. Aquella
mujer no sólo actuaba, de pronto empezó a cantar, y de su voz brotó Billie Holiday
de manera natural. Esta era una obra basada en el libro de Christine Otten, “Teníamos
ternura, teníamos armas”. Fue una
de las mejores pruebas de “Prueba el teatro”, una noche organizada por el teatro
local para dar a conocer la nueva temporada.
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