El día de la independencia y la construcción de la identidad diversificada

Uno a uno se fueron levantando. Cada quién con un relato diferente. Una persona tenía 38 años de vivir acá, la más vieja, y otra apenas dos meses, la más joven. Me llamó la atención una mujer que había sido adoptada, no hablaba español, no era una niña adoptada de la guerra, y estaba ahí, sin entender nada pero en busca de algo que se llama identidad. En búsqueda de un símbolo que le diera algún sentido a su color, su pasado sin una historia aún conocida. Su hermano también era adoptado. Y así habían muchas otras historias, de los que se casaron y se fueron, de los que estudian, de los salieron durante la guerra, los que se fueron por la violencia de los últimos tiempos, y tuvieron que salir exiliados en tiempos de paz, y así muchas historias más. Apenas vimos la punta del iceberg, las historias han de ser mucho más interesantes e intensas. Así una celebración de “la independencia” puede tener otros significados, descubrir en la historia de la gente una identidad diversificada.